sábado, 26 de mayo de 2012

Cincuenta años del Gran Combo de Puerto Rico







Que me perdonen los boricuas si me tomo prestado a su Combo y lo proclamo no sólo de Puerto Rico. Es que  los salseros de Colombia, Panamá, Venezuela, Perú, Estados Unidos, Mexico, América, Europa, Asia, en fin, del Mundo entero, lo sentimos también nuestro.

Algo especial debe tener Don Rafael Ithier, no sólo como músico sino también como persona. Es que no es fácil mantener un grupo humano por cincuenta años.

De aquellas reuniones donde la idea tomaba cuerpo hasta la definitiva del lunes 21 de mayo de 1962 cuando se decide la formación del grupo y se decide que el líder de la orquesta sería Don Rafa, El Gran Combo debuta el sábado 26 de mayo de 1962 (exactamente un día como hoy, sábado, de hace 50 años) en el Rock and Roll Club de Bayamón. Es el comienzo de la historia.

Pellín Rodríguez y Andy Montañez fueron las voces del Combo en los 60s. Bueno, debo mencionar también al dominicano Joseíto Mateo, quien le pone la voz a Menéame los Mangos (el primer disco oficial) para dar un soporte comercial al novato grupo. Es que me imagino que era arriesgado contratar a una orquesta nueva que intentaba “colgarse” en algo en el nombre de lo que había hecho ese boom socio-musical que representó para Puerto Rico Rafael Cortijo y su Combo con Ismael Rivera y empezar su propio camino.

Los invito a repasar su discografía en Gema, el sello de los Alvarez Guedes. Tangos, Pata Pata, Jala-Jala, Boogaloo.


Década del 60



De Acángana (el segundo LP) pasando por Maldito Callo, El Caballo Pelotero, Esos Ojitos Negros, El Swing y muchos títulos más, podremos encontrar música sencilla y sabrosa, un sonido particular hasta en los coros, gracias a “La Bala” Eddie Pérez y su voz nasal, la conexión con el Combo de Cortijo.

¿Queríamos Boogaloo?, nos dieron El Guaguancó de El Gran Combo. Eran Los Nenes Sicodélicos quienes, al empezar los 70s decidieron grabar para ellos mismos. Así nació EGC Records. De esa época me acuerdo de los coros de Elliot Romero y Paquito Guzmán, de los discos Por el Libro, En Acción y El Número 7, de temas como “Falsaria”, “Julia”, “Las Hojas Blancas”  o “El Barbero Loco”, donde se puede oír a un Ithier solista en el piano, rareza en una orquesta donde normalmente hay espacio sólo para que destaquen los cantantes y sus soneos y, sobre todo, el bailador.

Esa época de la disquera propia que duró casi ocho años, tiene como punto culminante la grabación de “Un Verano en Nueva York”. Hasta entonces habían entrado y salido unos pocos integrantes, pero sin variar el estilo del grupo. Los cambios sí se notaron cuando los cantantes fueron quienes partieron. Primero fue el añorado Pellín (fallecido en 1984), quien dio lugar a Charlie Aponte, y luego el “terremoto” que originó la salida de Andy, quien tuvo como sustituto a Jerry Rivas.

Coincidentemente Andy y Pellín salieron del Combo para hacer carrera en Venezuela, donde incluso grabarían juntos. ¿Se acuerdan de “Alacrán” o de “Aquí no ha Pasado Nada”? Libre interpretación.

Quiero dedicar unas líneas a Mike Ramos. Si ven  “Julia” en la película Salsa de la Fania All Stars no solo podrán apreciar el chorro de voz de Montañez sino también la coreografía especial de Mike, quien integró el grupo por aquellos años.

Década del 70


Ralph Cartagena acogió a Ithier cuando la aventura del sello propio expiró. Ahí empieza la saga de discos en Combo Records, los primeros que vi en la radiola Imperial de los Barrios Altos. En 1980 el dúo de cantantes se convierte en trío con Papo Rosario: Charlie, Jerry y Papo, hasta hoy permanecen al frente de la orquesta.

En 1983 Luis Perico Ortiz le dedica un Homenaje a Rafael Ithier en el disco Entre Amigos y en 1987 celebran los 25 años con un disco triple.

De esa primera etapa de Combo Records están, entre otros, los discos Aquí no se Sienta Nadie, Nuestro Aniversario, La Universidad de la Salsa y Nuestra Música y éxitos como “Brujería”, “Así Son”, “El Menú”, “Timbalero”, “Goyito Sabater”, “Y No Hago Mas Na”, “Carbonerito”, “Azuquita Pa’l Café”, “Resignación”, “La Loma del Tamarindo” y “La Fiesta de Pilito”.

La primera vez que pude verlos en persona fue en la Feria del Hogar de 1988. Era su segunda vez en Perú. La primera había sido en 1980 y de aquella solo ¿conservo? algunos videos en Betamax de una grabación para Panamericana Televisión. Carlos Loza había escrito en el Extra: “Yo lloré con El Gran Combo”, mostrando su emoción por aquella primera vista, que tuvo como evidencia su versión del vals “Bandida” en su Happy Days de 1981. ¡Quién iba a decir que se convertirían en la orquesta puertorriqueña que más veces ha visitado no solo Lima sino el interior del país!

Década del 80


Los tiempos en la Salsa cambiaron. El Gran Combo intentó amoldarse al nuevo estilo y produjeron discos como Romántico y Sabroso, Amame y Erupción. Su producción discográfica decae, aunque lograr pegar éxitos como “Cupido”, “Aguacero” y “Trinchera”.

Me acuerdo de haberlos visto en el Chimpun Callao, en Trujillo, en Ventanilla. Pude conocerlos en persona el año 2001, cuando emprendí aquella aventura de El Salsero impreso que tal vez alguno de ustedes aún conserve. Me llamó la atención la sencillez de todos. No le niegan un saludo o una foto a nadie (te consta, ¿no?) y lo hacen con la mayor humildad y sencillez. Es El Gran Combo y su Pueblo. Eso también los hace grandes.
Década del 90


El nuevo siglo comienza con su CD Nuevo Milenio, el Mismo Sabor, que es seguido por un disco celebrando sus 40 Años. De lo más reciente destaca su Arroz con Habichuelas y el homenaje que le hace el Banco Popular de Puerto Rico: Salsa, en las navidades del 2010.

El Gran Combo es una cooperativa donde todos sus integrantes cobran por igual, donde nadie destaca por encima del otro. Todos buscando que sea el público baile, goce y pase un buen rato. Pueden haber propuestas más elaboradas, pero la de El Gran Combo tiene un sabor y alegría como pocas y que en un 2012 tan diferente a aquel 1962 aún mantienen vigente.

Todos queremos a El Gran Combo, así los critiquemos a veces porque cuando vamos a verlos quisiéramos escuchar tal o cual canción. Sospecho que para esta gira de las Bodas de Oro nos darán alguna sorpresa. ¡Si no es ahora, ¿Cuándo?!

Y es por eso que como todos lo queremos, me permito la licencia de jugar con su nombre: El Gran Combo del Mundo.

Mike Amadeo les escribió “Que Me lo Den en Vida”. Estas líneas son una insuficiente respuesta a esa vida de medio siglo. Igual las intento porque se lo merecen. Es mi homenaje en vida para Don Rafa y “Los Mulatos del Sabor”.

Al día de hoy su último disco se titula Sin Salsa no hay Paraíso. Pues sin El Gran Combo no hay Salsa. ¡Que la sigan poniendo!

Fuente Eduardo Livia